No me ha hecho gracia.

No conocía a ese gato. No lo había visto nunca. Pero aunque hubiese sido un tiburón, hubiese sentido pena. Hay quien me llamará sentimental. Bueno. No era justo que un conductor cegato le arrebatase el derecho a vivir con un golpe en la cabeza y que, encima, lo dejase tirado en el asfalto como si fuese mera basura.
¿Es éso educación? ¿Te cargas a un pobre gato, lo dejas tirado -quizás moribundo- en medio de una calle, enfrente de un colegio, con todo el morro?
Sólo espero que no haya sufrido mucho.
También espero que el conductor imprudente sepa diferenciar a un gato negro de una piedra inmóbil en medio de la calle la próxima vez.
Dedico este post a todos los animales anónimos, que nadie conoce, y que mueren por culpa de borrachos, imbéciles o irresponsables.
muy cierto :/
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