miércoles, 7 de diciembre de 2011

China juega al póquer con el cambio climático

¡Estoy TOTALMENTE INDIGNADA! ¡Es más, estoy furiosa!
No se trata ni de la crisis, ni de cualquier otra cosa que ahora se me antoja superficial.
¡Estoy hablando del cambio climático!
A estas alturas, supongo que todo el mundo sabrá de que trata el cambio climático: muy resumido, por culpa de los que ahora tienen el poder, el planeta se está llenando de mierda y dentro de poco no se podrá ni vivir. Hay miles de datos sobre el cambio climático en Internet: deshielo de los polos, aumento de las temperaturas, aumento de dióxido de carbono, agotamiento de recursos naturales...
El mundo cambia, sí, y encima para mal. Pero no es por culpa mía, por que cuando yo nací todo ya estaba torcido. No es culpa, ni siquiera, de los que creyeron que los recursos del planeta eran infinitos y empezaron a consumir, consumir, consumir. NO, la culpa es de los que ahora cierran los ojos y miran hacia otro lado, como si la cosa no fuera con ellos, y que sin embargo siguen consumiendo y arruinando nuestro único y bonito planeta.

Y un ejemplo, es sin duda China.
No hablo ya de política o semejantes, hablo de algo de una gravedad similar: del impacto ecológico. Me sorprende que una cultura tan sabia y antigua como la china, que me ha hecho soñar con historias de dragones y de emperadores y de reliquias mágicas, ahora demuestre que de sabiduría, ya no queda nada.
A ver, una pregunta directa: ¿tu quieres a tus hijos o querrás tener hijos? Supongo que  la mayoría de respuestas son afirmativas. Bien, y querrás que tus hijos y tus nietos vivan y crezcan en un entorno feliz, donde puedan aprender y jugar y hacerse fuertes y valientes, pero dónde también puedan disfrutar de la naturaleza, hacer amigos y aprender valores como el de la generosidad, ¿me equivoco?
Entonces, mi gran incógnita es: ¿es que los chinos no quieren lo mejor para sus hijos? Por que, un mundo contaminado, lleno de animales muertos y ríos infectados, con apenas dos árboles por quilómetro cuadrado, no creo que los niños sean muy felices. Todo al contrario, odiarán a las generaciones anteriores, que exprimieron el planeta hasta la última gota y dejaron todo deshecho y sin vida.
Y, a cuento de todo esto, la noticia que ha hecho encender la mecha de mi dinamita: China no piensa pactar un acuerdo global hasta el 2020, o lo que es lo mismo, hasta que estemos en el punto sin retorno. Y quien dice China, también dice Estados Unidos, India... pero China es el caso que más me preocupa: ¿esta es nuestra próxima potencia mundial? ¿Un país que, en vez de dar ejemplo, contamina como el que más? Por favor, creo que ya tuvimos bastante con EE.UU. al cargo del mundo durante estos últimos años.
Desde Besaby, sólo quiero elevar mi voz, la voz de una chica que debe lidiar contra el cambio climático que se le echa encima, aún siendo una persona más en este mundo superpoblado y supercontaminado.
No creo que China recapacite leyendo esto, pero al menos, tú, que me estás leyendo, estarás de acuerdo conmigo en que no es justo que un par de países jueguen al póquer con el futuro de TODO EL MUNDO. Y no exagero, por desgracia.

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